Cómo pueden las empresas aprovechar las duplas laborales para mejores resultados

Así como en la familia se precisa de la división de roles para cumplir con todas las actividades de la semana, los lugares de trabajo también requieren del aporte de cada uno de sus miembros para que todos cumplan los objetivos esperados. Es en este contexto que surgen las duplas y con ellas la necesidad de un entendimiento propio pero también para con el otro.

En este sentido, ICF plantea desde qué lugar puede colaborar el coaching a que estas “parejas” aprovechen sus conocimientos para acelerar su rendimiento.

Según una investigación realizada por la Revista Internacional de Psicología del Coaching (International Coaching Psychology Review), el Coaching puede impactar positivamente en la autoeficacia de una persona, basando esta conclusión en la evidencia de que quienes participaron de un proceso de coaching obtuvieron un mayor nivel de autoeficacia que aquellos que no lo hicieron.

En consecuencia, si el coaching ayuda a la persona en su individualidad también impactará en su trabajo grupal.

Aunque se trate solo de dos personas esto es suficiente para hablar de un trabajo en equipo. Como tal, implica que ambas partes reconozcan sus puntos fuertes y también sus límites para apoyarse en el otro. Catherine Medranda, Associate Certified Coach ICF explica:

“El trabajo en parejas es una labor colaborativa entre dos personas que trabajan simultáneamente en la misma tarea, aportando con sus competencias técnicas y humanas”.

¿Por qué el Coaching a pares es favorable para las empresas?

La coach latinoamericana destaca los puntos por los que se recomienda potenciar las duplas laborales:

-Proporciona herramientas para gestionar los conflictos y comunicarse asertivamente.
-Establece un enfoque centrado en los objetivos específicos y generales planteados por la empresa.
-Permite potenciar las fortalezas del colaborador y diseñar un plan de acción que desarrolle las competencias que necesita mejorar.
-Facilita la implementación de un sistema colaborativo, basado en la satisfacción personal de los colaboradores y en el éxito de sus resultados.

Asimismo, Catherine Medranda agrega: “El coaching se reconoce cada vez más como una herramienta clave para acompañar a las organizaciones en sus procesos de cambio e innovación”. En este sentido, reconocer y potenciar las habilidades del capital humano (individual o grupal) constituye un paso más en el impulso empresarial.