Reconstruir el futuro: la UNAM usa IA para revelar cómo sería un niño desaparecido hoy

Una respuesta tecnológica a una crisis nacional

México enfrenta una tragedia silenciosa: cada día desaparecen en promedio 25 menores. En ese contexto, la antropóloga Ana Itzel Juárez Martín, junto a un equipo de investigadores, propuso en 2022 un sistema capaz de visualizar cómo sería hoy el rostro de un niño que desapareció hace años. La iniciativa, financiada inicialmente por una convocatoria de la UNAM y Huawei, dio origen a "Regresa".

¿Cómo funciona "Regresa"?

El sistema combina varias disciplinas:

• Antropología física y social, que estudia los ritmos de crecimiento y los cambios hormonales propios del desarrollo.

• Bases de datos faciales, con más de 75 personas que compartieron imágenes en diferentes etapas de su vida, para entrenar al algoritmo.

• Modelado 3D, que permite identificar puntos clave del rostro y simular su evolución a lo largo del tiempo.

• Inteligencia artificial, entrenada específicamente con patrones de crecimiento propios de la población mexicana.

A diferencia de apps que simplemente agregan arrugas, este sistema modela transformaciones reales, con base científica, considerando variables como género, genética y entorno social.

Doble funcionalidad: hacia adelante y hacia atrás

Una de las características más innovadoras de "Regresa" es su doble capacidad. No solo permite visualizar cómo se vería hoy un niño desaparecido hace diez o veinte años, sino también generar una imagen infantil a partir de un rostro adulto. Esto podría ser clave en casos donde un adulto sospecha haber sido sustraído en su infancia y busca reconstruir su pasado.

La importancia de adaptar la tecnología al contexto local

Este proyecto parte de una premisa clave: los algoritmos importados no siempre reflejan la diversidad morfológica de la población mexicana. Por eso, "Regresa" trabaja con rostros reales de voluntarios del país, lo que le permite construir predicciones más ajustadas y evitar sesgos comunes en sistemas extranjeros.

El modelo tiene en cuenta no solo el paso del tiempo, sino también factores hormonales, asimetrías, densidad ósea y otras variables biológicas que influyen en el envejecimiento facial.

Un proyecto con impacto social y ético

"Regresa" nace en un contexto alarmante: más de 108?000 menores han sido reportados como desaparecidos en México desde 1964. De ellos, miles siguen sin ser localizados. Esta herramienta no reemplaza la labor de las comisiones de búsqueda, pero sí puede ser un recurso adicional poderoso para generar hipótesis visuales más realistas.

Además, el proyecto cuenta con estrictos protocolos éticos: consentimiento informado, anonimato de los voluntarios y confidencialidad en el tratamiento de datos.

Ciencia con rostro humano

Este desarrollo refleja una de las mejores caras de la inteligencia artificial: una que no busca reemplazar a nadie, sino ayudar a encontrar a quienes fueron arrancados de su identidad.

El equipo de "Regresa" está conformado por antropólogos, programadores, especialistas en criminología, expertos en redes neuronales y estudiantes de distintas carreras. Todos comparten un mismo objetivo: que la tecnología se ponga al servicio de la memoria, la justicia y la esperanza.

¿Qué sigue?

Tras finalizar la etapa de prueba, el equipo trabaja para ampliar la base de datos y establecer vínculos formales con fiscalías y comisiones de búsqueda. A mediano plazo, planean ofrecer la herramienta a instituciones oficiales que trabajen en la localización de personas desaparecidas.

También se espera mejorar la capacidad de procesamiento y ampliar la precisión de los modelos con más muestras y colaboración internacional.

Un mensaje visual que puede cambiar vidas

"Regresa" no solo genera imágenes: crea oportunidades. Permite que un rostro vuelva a existir, que una madre reconozca una mirada, que una familia tenga una pista más, que la identidad no quede enterrada en el tiempo. A través de la ciencia y la inteligencia artificial, el proyecto demuestra que la tecnología puede ser una aliada poderosa cuando se pone al servicio de las personas.