Santiago Guglielmetti: "Argentina es una tierra de oportunidades increíbles"

Santiago Guglielmetti es uno de los fundadores de WINIM, una aplicación creada por jóvenes emprendedores argentinos que mezcla el cuidado del medio ambiente y el impacto social. "A nosotros nos apasionaba el medio ambiente y el impacto social, y tras descubrir una problemática ideamos una posible solución que podía impactar; así que así empezó este camino de emprender y generar una solución a un problema, que no solo es una realidad de Argentina sino del mundo", cuenta Guglielmetti a Desmarcarte.

WINIM es una startup que nació en 2019 tras la idea de tres amigos -hoy socios- que tenían la misión de ayudar a los comercios a vender el excedente de comida diaria. A partir de ese objetivo, el emprendimiento busca cuidar al medioambiente evitando que se tire comida y ayudar a crecer y entrar al sistema a los sectores más vulnerables.

Según cuenta Santiago a Desmarcarte, su deseo por emprender y crear la aplicación con sus amigos, parte de uno de sus primeros trabajos, en el que, como asesor de un político argentino, tuvo la oportunidad de recorrer las rutas y autopistas del país. "Allí entendí la importancia de la logística, tanto del sector productivo como para la gente en general. Entender esto me llevó a aplicar a becas en logística y comercio, que por suerte pude acceder a una y con eso no solo aprendí, sino que entendí un poco más el mundo de la tecnología".

Cuando Santi tenía 24 años empezó el sueño de WINIM, una PyME que gracias a la tecnología geolocaliza restaurantes que están a punto de tirar comida del día para comprarla a un precio más accesible que el original y beneficiar así a otros consumidores. Su emprendimiento es un éxito en la Argentina, y ahora, en su lucha contra el desperdicio de comida, aspiran a expandirse a países de la región o de Latinoamérica, como por ejemplo, México.

El motor de su idea

En diálogo con Desmarcarte, Guglielmetti cuenta que su principal motivación fue parar el desperdicio de alimentos, ya que solo en Argentina se tiran 16 toneladas de comida año.

Consultado sobre su principal motivación para crear WINIM, el joven emprendedor respondió: "En realidad son dos grandes problemas o problemáticas universales, y nosotros encontramos lo que podía ser una solución simbiótica".

"Por un lado tenés que, uno de tres platos de comida que se producen terminan en la basura. Son 16 millones de toneladas que se tiran en Argentina, en una situación donde ni la economía ni la producción ayudan, y al mismo tiempo, hay mucha gente pasándola muy mal", describió.

"Necesitábamos de alguna forma de unir esas dos partes, en las que unos tienen de más y no lo logran vender, y otros tienen menos debido a un problema completamente de distribución y logística o de tecnología… Lo que te permite la tecnología es llevar soluciones que antes podían ser pensadas pero no realizadas, pero hoy son factibles gracias a la tecnología, y nosotros pudimos hacer eso", describió Guglielmetti.

Cómo lograron concretar la idea

Asimismo, cuenta a Desmarcarte que tras un arduo trabajo, en donde se mezclan datos, tecnología, distribución y logística, hoy en día no solo llegan a barrios vulnerables, sino que están trabajando de la mano de algunas grandes empresas del país.

"Nosotros pudimos hacer eso en base a conseguir los datos de las empresas, de bases de sobrestock, de productos que quizá no llegan a venderse por la temporada, productos con problemas de packaging. Por ejemplo, ahora hay muchos problemas con los octógonos -ley de etiquetado-, todos los productos que no tengan esos octógonos ya no son comercializables", explicó el emprendedor, al tiempo que detalló el proceso de negociación con restaurantes y marcas para que esos alimentos puedan llegar a un precio más bajo a almacenes de barrio.

"Nosotros pudimos coincidir con todos esos datos de esos productos que antes se tiraban, los conseguimos a un precio de descuento, y unirlos con la gente que vive en barrios populares, con gente que quizá está un poco más corta de pesos, gente a la que les afecta el impuesto a la pobreza; y así rompemos con esa desigualdad, proveemos al barrio, lo llevamos al barrio que quizá no tenían tantas marcas u oportunidades de negocios y así le damos una oportunidad de crecer", sentenció.

El impuesto a la pobreza

Los creadores de WINIM hablan del impuesto a la pobreza, es el sobrecosto que tienen los vecinos de barrios populares por el hecho de vivir fuera del sistema, impuesto con el que a través de su app quieren terminar.

"Un ejemplo muy simple es: si vos querés sacar un seguro vivís en Palermo, te va a salir 100 pesos, pero su va un vecino de un barrio popular tiene que pagar mucho más por vivir en un lugar riesgoso, entonces el impuesto a la pobreza es el precio extra que tienen que pagar por ser pobres, es una locura que exista pero es así y afecta a un montón de rubros, uno de ellos es el sector de alimentos, tema que nosotros buscamos erradicar", comentan.

"Al tener dificultades logísticas los barrios pobres, no pueden ser provistos de la misma manera que cualquier otro barrio de la Ciudad", sentenciaron.

Emprender con amigos

El éxito de su aplicación también se basa en el equipo que tiene WINIM, conformado por tres jóvenes amigos que se arriesgan a invertir y crecer pese a las dificultades que tiene la Argentina.

"Tiene lados positivos y lados negativos, por un lado hay confianza para decirte lo que quieras; por el otro, te da mucha confianza de que si tomás riesgos y algo sale mal la cohesión del equipo se va a mantener, entonces eso es tanto como un voto de confianza interno… nosotros somos bastante complementarios en las habilidades de cada uno, entonces en ese sentido fue muy bueno emprender con amigos", detalló Santi.

Argentina, país de oportunidades

"Argentina es un lugar espectacular para emprender, hay momentos buenos y malos de la economía siempre, aunque principalmente malos", dice con ironía y entre risas Guglielmetti, que no dudó en poner a la Argentina en el podio de los países que más oportunidades de emprender da a los jóvenes.

"Es muy cliché decirlo pero para mí Argentina es una tierra de oportunidades increíble… La gente tiene mucho espíritu emprendedor, todos tienen intrínsecamente las ganas de encontrarle la solución a lo que hacen, hay mucha y muy buena educación en la gente, entonces cualquier solución que el argentino encuentre suele ser técnicamente viable, hay mucho conocimiento del mundo tecnológico, entonces se está formando una comunidad de emprendedores muy buena", comentó.

A su vez, consideró que esa idea de "granero del mundo" de hace 100 años, es posible. "Yo todavía creo que es revivible, y llevar una solución que implique poder ayudar a los que necesitan, sabiendo de las dificultades económicas que tiene la Argentina, que es una constante, me parecía ideal".

Emprendedores unidos

La buena noticia es que según los creadores de WINIM, los emprendedores argentinos se ayudan entre sí, una especie de comunidad organizada que se tiende la mano para seguir creciendo y sobrevivir en un complejo escenario económico y social como registra actualmente el país.

"Todavía no es espectacular como pueden ser algunas comunidades en Estados Unidos o Europa, pero sí hay mucho contacto, mucha sinergia, todo el tiempo hay oportunidades de encontrarse, y la verdad que sí, vos hablás, te ayudás, te presentás con gente, y además como que sabes que estás en la selva con el cuchillo entre los dientes y están todos en la misma, están todos ayudándose entre sí, eso sucede un montón, por suerte, y no es algo que suceda en muchos países", describió.

Claves para emprender

Emprender no es fácil, son muchas más las personas que tienen una idea y ni siquiera intentan concretarla por miedo al fracaso. En ese sentido, los creadores de WINIM comentaron a Desmarcarte cuál fue la clave para llevar adelante el proyecto que hoy sostienen.

"Jugársela, no quedarse en la idea, porque todos siempre tienen ideas buenas, pero jugársela, si estudias la idea, la problemática y tiene sentido lo que haces, ármate un modelito de negocios; aunque no tengas la plata para emprender, andá con tu idea, que quizá alguien te la pueda financiar como hicimos nosotros que no teníamos un peso. Quizá tienes una solución a un problema del mundo y quizá alguien solo te la tiene que financiar", reflexionó Santi.

"Y por último, pero no menos importante, es que seas muy ordenado y previsor con tu forma de gastos, no contratar personal de más, no quemar por quemar plata, pensar más en retener a quienes le interesa tu proyecto e invertir en tu cliente", cerró.